Cuenta la leyenda que hubo un tiempo en un lugar en el que el sol salía por el este y se ponía por el oeste. Bellos amaneceres, bellos atardeceres en una tierra árida, seca, pero con una magia maravillosa. El suelo era resbaladizo por la arcilla y sus paisajes recogían el aroma de las sabinas, el tomillo, el romero, el esparto y las aliagas. Montes llanos, canteras y torrollones en los que habitaban seres agradables, cuidadores de sus propias casas, cuidadores de la naturaleza. Estos seres eran… Los Guardianes de la tierra de Los Monegros. Su misión consistía en proteger a los habitantes más frágiles, más dependientes y con menor capacidad de supervivencia...
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Los guardianes de los Monegros tenemos una misión frente al COVID_19:
—¿Cómo les podemos ayudar?, ¡los Guardianes se deben poner en marcha!, ¡tenemos una misión! —replicó Pinzón.
Pinzón, como buen capitán se puso manos a la obra.
—Nos tenemos que organizar: Laguno, tú vas a recabar información para presentarnos al virus que está provocando semejante desconcierto. Dra. Fuentes, tú te vas a encargar
de enseñarnos cuáles son las medidas de contención de propagación del virus.
Dicho y hecho.
Estad todos muy atentos un mensaje quieren dar Los Guardianes de Moengros para el COVID derrotar
—¡Vamos, esto lo conseguimos entre todos! ¡hasta pronto!
¡volveremos! se despidieron los Guardianes de Los Monegros.
LETRA, MÚSICA Y VOZ: Laura Ibáñez Cabrejas
TEXTOS: María Teresa Paraled Campos. Enfermera pediátrica. C.S. Sariñena.
ILUSTRACIONES: Isa Campo Villellas. Diseñadora gráfica. Sariñena.
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